Con
un nuevo invernadero con tecnología israelita se inician los cultivos en el
Valle de Lluta. Esta infraestructura es de estructura metálica galvanizada
cubierto en los contornos con malla anti-insectos que va cubierto de plástico
especial que permite aumentar la temperatura durante el día e impedir una baja
brusca de temperatura en la noche. También, el plástico permite una mejor
luminosidad que se refleja en un mayor crecimiento de las plántulas por el
hecho, de aumentar la tasa de fotosíntesis.
Además
cuenta con un sistema de ventilación para los períodos de verano que permite
levantar el plástico lateral dejando malla anti-vector de tal manera de
permitir una mayor ventilación.
Aquí
se realizará la habilitación del terreno para que los futuros técnicos cultiven
Ají Variedad Inferno, que ha mostrado en un primer ensayo en este liceo, la
capacidad de adaptación a los suelos y aguas del sector.